Redacción. Las dos principales navieras, Maersk y MSC, deciden poner fin a la alianza 2M. El crecimiento de cada una de las empresas que han formado parte de esta alianza ha sido despareja y ello sitúa a cada una en aceras diferentes.
MSC ha mostrado un incremento en su crecimiento empresarial y en su flota, poniendo de manifiesto que es lo suficientemente grande como para mantenerse sola. Ello da cuenta que, desde agosto de 2020, MSC ha adquirido 271 buques de segunda mano, con una capacidad de algo más de 1 millón de unidades equivalentes a veinte pies, de esta manera en el plan de inversión MSC ya supera toda la capacidad de HMM, el octavo transportador más grande del mundo, según Alphaliner.
Por su parte, Maersk no ha aumentado la capacidad de su flota en los últimos tres años porque está orientando su quehacer empresarial para posicionarse en el mercado como integrador logístico de extremo a extremo.
Son muchas las opiniones vertidas al respecto. El analista naviero de Alphaliner y editor para Europa, Stefan Verberckmoes, destacó que “es lógico que MSC siga por su cuenta porque cuenta con recursos suficientes para ofrecer una red mundial sin socios, que es lo que solía hacer antes de unirse a 2M en 2015. Al momento de la alianza era como un matrimonio forzado, porque en aquel momento las economías de escala eran muy importantes, todo el mundo quería tener grandes buques y la única forma de llenarlos era cooperando. Ahora los tiempos son completamente distintos. MSC puede volar con sus propias alas”.
A su vez, desde Maersk, aseguran que seguirán participando activamente en acuerdos de reparto de buques y destacan que están activos en más de 40 VSAs.
Las estrategias de ambas compañías han sido muy diferentes, por un lado, Maersk ha apostado todo por ser un integrador logístico de extremo a extremo. Por lo tanto, ya si la empresa se centra en la experiencia del cliente y en la logística de extremo a extremo, el transporte marítimo se convierte en un simple engranaje de una gran máquina. Ese engranaje sólo tiene que funcionar. No es necesario ganar dinero con él, porque se gana dinero con la logística integral. Por otra parte, la estrategia de MSC se ha centrado en el transporte marítimo como fortaleza empresarial. Es así que estrategias tan disímiles han provocado fricciones dentro de esta alianza.